Transporte en Sidney

Las calles del centro de la ciudad de Sidney sin duda han sido hechas para disfrute de los ciudadanos, ya que son llanas y es muy fácil ubicarse en ellas gracias a la buena señalización de la que dispone la ciudad. Si usted pretende visitar las áreas periféricas de la ciudad necesitará de algún medio de transporte.

Monorail de Sydney
El Monorail de Sydney

Para los turistas extranjeros o los propios australianos que quieran moverse por la ciudad, Sidney tiene el aeropuerto a una media hora de coche o tren. Llegar, por tanto, al centro de la ciudad no supone ningún tipo de problema, puesto que existe una línea de bus que pasa cada veinte minutos por las terminales.

Los precios de los vuelos son bastante razonables y adaptados a todo tipo de bolsillo, ya que en estos aeropuertos operan también algunas compañías de bajo coste (low cost).

Analizaremos a continuación el medio de transporte que conviene utilizar para cada ocasión, lo cual dependerá, en gran medida, de las distancias a recorrer y del destino al que queramos llegar.

Moverse en tren en Sidney permite recorrer diferentes ciudades y estados australianos. Este medio de transporte es también muy utilizado por los habitantes de la ciudad para moverse por ella. De hecho, existen varias líneas y múltiples estaciones y una línea circular que pasa por todas las estaciones del centro: Circular Quay, Town Hall, Central Museum, Wynyard y St. James Stations.

Los precios de los billetes de tren varían según los kilómetros a recorrer y pueden adquirirse en las máquinas expendedoras. Los abonos son mensuales o semanales y existe una tarifa de estudiantes, pero ninguna pensada para los miles de turistas que anualmente visitan la ciudad.

Por su parte las líneas de autobús en Sidney circulan alrededor de toda la ciudad. Los atascos y la afluencia de tráfico la hacen una ciudad impredecible, así que es mejor ir sin prisas si tenemos pensado tomar un autobús. No trae a cuenta hacerse con un billete de un solo viaje; si vas a pasar varios días en esta bonita urbe lo mejor es que te hagas con un abono de 10 billetes.

Si quieres disfrutar de una forma diferente de admirar la ciudad y otra perspectiva a los tradicionales buses turísticos, la mejor forma de hacerlo es en ferry. De esta manera uno puede visitar lugares como el Zoo o la playa de Manly.

Los precios variarán según la persona que se haga que compre el billete, existiendo descuentos para estudiantes y personas de edad avanzada.

Otra de las opciones, pero siempre debe estar entre las últimas, debido al importe que nos tocará pagar, es coger un taxi. Opción, que se puede obviar si usted dispone de varios días y tiempo de sobra para visitar la ciudad.

Para moverse entre las zonas más representativas de la ciudad Sidney nos ofrece el Monorrail y el Rail ligero. Y sí, para estos medios de transporte se ofrecen descuentos a turistas.

Se desaconseja el uso de coches de alquiler en la ciudad, ya que los australianos no se caracterizan precisamente por ser conductores demasiado prudentes, pecando incluso de exceso de velocidad y poca paciencia en las carreteras. Asimismo, la edad mínima para alquilar un vehículo es de veinticinco años. Otra desventaja del alquiler de coche es que si las plazas de aparcamiento son públicas el usuario jugará con una limitación de tiempo de dos horas, con lo cual no dispondrá de apenas tiempo para sus citas culturales. En caso de dejar el coche en un aparcamiento privado, el precio es excesivo.